La parte culpable generalmente se considera responsable de todos los daños incurridos, y se espera que proporcione una remuneración financiera para restaurar el nivel de vida de las víctimas del accidente a lo que era antes del accidente. Esto significa que la víctima puede buscar compensación por daños a la propiedad, tratamiento médico, dolor y sufrimiento, pérdida de ingresos actual y futura, gastos médicos y de rehabilitación futuros y disminución de la calidad de vida.

Como los profesionales tienen un estándar más alto, la mayoría de los conductores de vehículos comerciales tienen pólizas de seguro con límites más altos que pueden traducirse en premios más altos. Dependiendo de las circunstancias que rodearon el accidente, los conductores, propietarios de camiones, fabricantes, el gobierno u otra tercera parte negligente podrían ser responsables de sus pérdidas.